martes, 23 de agosto de 2016

Si de mieDos HabLamos

Le temo a muchas cosas en esta vida, definitivamente a muchas cosas, a la oscuridad por ejemplo, a decir adiós y que ese adiós sea para siempre,es otra de ellas, Pero si a algo le tengo terror desde que recuerdo, es a dos cosas,  solo dos cosas que hacen que me muerda las uñas de las manos y los pies, y sienta que no hay manera de poder sobrevivir a ellas.

Desde muy joven decidí que no quería tener hijos, porque considere en ese entonces que ser madre no era cosa para mi, que no tenia madera ni la gracias suficiente. Con el tiempo me di cuenta que era miedo, miedo al dolor que se supone que se siente al parir a un engendro, miedo a no tener la paciencia requerida, incluso miedo a que con ese engendro me tocase pagar todas las que yo había hecho como muchas veces escuche decirme a mi querida madre.
Cuando estaba estudiando la universidad, en mi clase de pruebas proyectivas me aplicaron una que se llama Rochard, una lamina en especifico fue la que llamo mi atención y nunca pude olvidarla, me causo escalofríos, me dolió la panza y me dieron muchas ganas de llorar, lo que yo vi, y que nadie mas vio, fue dos matronas metiendo sus manos en un vientre nada fértil, removiendo no se que cosa pero causando mucho dolor, y a los lados 2 fetos muertos.me impresiono mucho mi visión, y justo en ese momento pensé que jamas podría tener hijos, y dolió , pero decidí evadir el tema y pensar : que bueno, al cabo que yo ni chamacos quiero tener.
En mi crisis de los 30s me di cuenta que lo que me causaba verdadero terror era querer un hijo y no encontrar a mi hombre ideal y quedarme sola tratando de hacerme cargo de mi y de uno mas. Deseaba tener un hijo, pero el hombre a mi lado en esa época se negaba rotundamente, así que utilice todas mis artimañas conocidas para hacerme creer que era yo la que no quería ni necesitaba ese instinto maternal. 

Paso el tiempo. Y un buen día me encuentro a un hombre que esta lejos de ser un príncipe azul, pero que es justo lo que yo buscaba, y hablamos de tener hijos y dejar de ser dos para convertirnos de familia de tres. Vuelve a pasar el tiempo. Y no pasa nada. NO hay sorpresas, no hay nauseas, no hay nada, mas que un dolorcito en mi vientre que nada tiene que ver con embarazos planeados, sino con infecciones y medicamentos. Entonces decido ir al doctor y lo único que resulta es un diagnostico desfavorable donde al parecer tengo miomas en la matriz lo que supongo no me deja embarazarme, y muchos análisis de sangre que dicen que soy pre-diabetica. Sorpresa!!! tu segundo terror se hace presente, la maldita diabetes, que porque en mi familia hay mucha predisposición y seguro a mi me toco desarrollarla. Váyanse a la mierda!!! y quien quiero que se vaya a la mierda,? pues la verdad no se, supongo que estas enfermedades, supongo que todos los planes, no, se, que se vaya a la mierda la mierda jaja, no se. 

Así que aquí están mis dos grandes calamidades, que ahora se quieren quedar a vivir conmigo y a las cuales no les doy la bienvenida, no se en que cuarto ponerlas, no se que tengo que hacer con ellas, Malditos miedos, no cabe duda que se apoderan de ti cuando menos piensas, pareciera que tienen vida propia, pero resulta que no!! que mas bien se apropian de la tuya.

El arte de mi querida jolli

El arte de mi querida jolli
muchias graxias por el regalito